Viaje de ensueño

Estas, mis vacaciones laborales número 23 ininterrumpidamente, han sido las más fabulosas, geniales, hermosas, extraordinarias y especiales que haya podido disfrutar.

No importaron las horas de viaje, las colas, el calor, la espera, los pies quemados ni la sed. Son nimiedades, dirían por ahí, si las comparo con todo lo que mi corazón vive y siente, y lo que a plenitud corre por mis venas, además de sangre.

Por estas cosas de la vida, de mi vida, ellos no habían podido juntarse más que a través de un teléfono o por partes. Los cuatro sonrieron, se abrazaron, lloraron, pelearon, jugaron, soñaron… Cada segundo de estas dos semanas, dibujaron lo que fui, soy y seré; modelaron con plastilina y pintaron de colores cada instante juntos…

Felices, nuestro viaje continúa, en el porsiempre de nuestras vidas, unidas en alma, arraigadas en cada uno con nombre y apellido, pero sobre todo ganados a seguir recorriendo juntos, donde estemos, cada camino tomados de la mano…

El viaje no estuviera completo sin mis dos pilares, los que me permitieron devolverles la sonrisa que me regalaron al verme nacer.

Gracias…!